Siempre se ha manejado la equivocada idea de que el ajedrez sólo pueden jugarlo personas inteligentes. ¡Y no es del todo cierto! De hecho, no hay verdad en tal afirmación.
Al contrario, el ajedrez es quien nos hace inteligentes, o por lo menos, mucho más de lo que ya somos.

Y algo similar ocurre con los negocios, pues por ahí dicen que estos sólo pueden llevarlos a cabo personas especiales, cuando la realidad es que cualquier persona que haga negocios, ya es especial.
Entonces, el experto en skill marketing, Gian Claudio Chinnici, afirma que:
La relación entre los negocios y el ajedrez se ve en cada movimiento sobre el tablero y en cada decisión estratégica que tomemos para generar excedente económico.
Asimismo, agrega que “también es notorio en muchos otros aspectos. Por ejemplo, en la verticalidad de los objetivos: cuando vamos probando a ver qué pasa, ¡no logramos nada! En cambio, cuando apuntamos a un jaque mate o un propósito claro, ¡los resultados llegan!”.
Y ¡vaya que goza de toda la razón!
Por ello, haremos especial mención a todos esos principios que comentábamos al inicio de este post:
Factor tiempo
Un análisis elaborado por Google y Alphazero demostró que uno de los puntos claves para ganar en el ajedrez y en los negocios, es actuar en el momento correcto.
No olvidar el objetivo
No juegas ajedrez para comer piezas, ¿cierto? Lo jugas para lograr hacer jaque mate.

Pues, lo mismo… No estás en las redes para hacerte famoso, sino para generar la mayor cantidad de ventas posibles.
Construir el jaque mate
Ten en cuenta siempre que un jaque lo puede lograr cualquiera. Pero un jaque mate sólo se obtiene construyendo los recursos necesarios.
Perder para ganar
Perder una torre o un alfil puede incluso resultar positivo, siempre y cuando el premio sea una reina o un jaque mate.

Objetivos pequeños ¡también cuentan!
A veces es necesario librarse de un peón para que el juego simplemente pueda fluir.
Buscar el menor esfuerzo
Ya dijimos que el factor tiempo es un punto clave. Y este sólo se domina aplicando técnicas que requieran el menor movimiento de piezas.

Definir la estrategia
En principio, debes tener un plan de ataque; luego, ir adaptándolo a la realidad de cada instante.
Tener un plan secreto
Toda estrategia debe contar con un Plan B. Y si este es secreto, ¡pues mejor! Sólo así lograrás sorprender a muchos en el momento justo.

Y a modo de reflexión, necesario es que sepas que en el ajedrez y en los negocios, se debe amar lo que se hace, pero lo más importante es permanecer en absoluta y plena concentración.